Cada tanto me gusta hacer este tipo de cosas porqué me recuerdan las cosas que no me gusta hacer y el porqué hago lo que hago. Además me da una imagen más real de otras realidades, seguramente muy distintas a la mía.
Lo bueno del trabajo mecánico es que uno puede darse un lugar para la reflexión y al mismo tiempo hacer algo útil. Acá dos reflexiones más algo que quiero dejar escrito:
- Si uno acomoda bien las cosas, se organiza bien, el esfuerzo necesario es menor. Medio simplón parece esto al hablar de ladrillos, pero después de mover el ladrillo 200 te quiero ver... :P
- La organización se desgasta con el tiempo/cansancio.... jeje, cuando ya iba en la recta final, ya no me daban las energías para cumplir con la metodología planteada para la tarea, así que fui "un poco a los tumbos".
- Se puede ganar tiempo, hoy gané un día. Esta es la segunda vez que muevo ladrillos, usando de referencia la primera vez, estime que iba a tardar dos días en mover lo que me faltaba... Finalmente le puse huevo a la situación y lo que estimé que iba a hacer en dos días lo terminé hoy. Esto me dejo con estímulos positivos para continuar con el trabajo en casa para el próximo fin de semana.
Y para despedirme, saludos a Juan!! Mariano me mandó los tuyos :D
No hay comentarios:
Publicar un comentario